eL iNiCio

Nunca creí en los regalos “empaquetados”, ni en el cheque del Corte Inglés como solución a la poca imaginación para encontrar el detalle especial para alguien. Tampoco he sido convencional ni metódica en los calendarios “happy birthay to you”, y digo esto para que los que lo han sufrido en sus propias carnes me lleguen a perdonar algún día.Pero lo que siempre me ha gustado es compartir. Es mucho más generoso llegar a tener algo y no quedártelo para ti solo/a, que sacar esas bandas de plástico con un buen montón de dígitos y comprar el detalle de turno.Así que en un ataque de “altruismo musical incontrolable” he decidido crear este blog y “colgar” todo aquello que me gusta para mí y que compartiría contigo.Tengo la sensación que NO todo se quedará en un recopilatorio audible... y puede que la cosa degenere y se cree uno de esos mundos donde las personas “colgamos” aquello que nos pasa, aquello que pensamos, aquello que quisiéramos decir y que no nos atrevemos... algunas cosas mágicas, algunas cosas míticas, lo típico, lo tópico ... pero dejemos de pensar lo que será y empecemos a crear lo que es.
M.

22 nov 2009

Un DoMiNgO cUaLqUiErA



Parece que el sol se ha quedado en otro lado del mapa, porque recojo la cortina y el color del cielo es de un gris sólido. Eso no impide que sea un día fantástico. Me desperezo, y mientras lo hago, Theo ya me ha escuchado y viene corriendo a darme los buenos días, es decir, salto salvaje encima de mí, y ronroneo incontrolable. Sé que me quiere, pero en realidad me está diciendo “para cuándo mi desayuno, perezosa!?!?!?”

Me preparo café para que funcione la máquina, y bajo a por unas pastitas saladas a la pastelería de al lado de casa. Hacen cosas increíbles, y hoy es un día perfecto para saltarse la dieta.

Es lo que tienen los pijamas de Osho, que te permiten bajar a comprar sin necesidad de cambiarte ;).

Me siento, cojo el periódico y por supuesto, no puedo olvidarme de la música.





Qué bien sabe el café recién hecho, con este trocito de hojaldre con la almendra...

Mientras Ray lamontagne suena, voy a darme una ducha rápida, reparadora. Y mientras pongo el agua caliente ...






Con el portátil conectado para poner música he podido cruzar una conversación con Dani, él sabe apreciar lo que es un domingo cualquiera...

O un lunes, o un martes, o un viernes... todos los días son perfectos para disfrutar de las pequeñas cosas que nos hacen felices, y no, no voy a explicar lo que es la felicidad, pero sé que puedo hacer una lista de aquello que me hace feliz.


Por eso hoy es un día maravilloso, hoy es domingo cualquiera para disfrutar de mi taza de café, mis pastitas y de la música que me gusta, aquella que acompaña todo lo que hago.

















Patinar por el paseo marítimo, ir a comprar a la bodega de toda la vida ese vino fantástico del priorat, cenar con mis amigas mientras nos explicamos cualquier cosa, quedar y desayunar con mi vecino y amigo en la panadería un Donut de chocolate y un té rojo, llamar a mi hermana y poder contarnos las cosas del día a día, visitar a los amigos que acaban de ser papas y verles la cara de felicidad aún cuando no pegan ojo por las noches, cepillar a Theo y oírlo ronronear de alegría, hacer fotos, ir al gimnasio, escribir, tomar el sol en mayo con un buen libro entre mis manos, comer con mi familia un domingo a mediodía y comprobar que todo sigue igual que cuando marchaste de casa, ver una peli en el sofá...